Tengo que empezar esta reseña diciendo que hacía más de ocho años que no me leía un libro en un solo día. Ya daba eso por imposible… hasta que Playa del Inglés llegó a mis manos. La verdad es que lo empecé de forma totalmente improvisada: estaba en casa de mi madre, ella se estaba leyendo el libro y lo vi sobre la mesa durante la hora de la siesta. Pensé: “Bueno, voy a leer un poco”. ¿Un poco? ¡Leí más de 200 páginas del tirón! Fui incapaz de parar. Una vez que entras en la historia, te atrapa por completo y las páginas vuelan. Tuve que dejarlo solo porque las responsabilidades me llamaron, pero en cuanto llegué a casa, fui directa a buscar mi propio ejemplar… y lo terminé.
Playa del Inglés nos cuenta cómo la vida de Acerina cambia radicalmente cuando recibe una llamada: su marido, Genaro, ha tenido un accidente. Pero no solo eso… no está donde ella pensaba que estaba. Supuestamente estaba en Madrid, en un congreso. Pero la llamada viene desde Playa del Inglés. Y eso no es todo: el accidente ha sido en un local de ambiente. En ese momento, toda la perfección que rodeaba su vida empieza a desmoronarse. Pero… ¿Cómo puede ser real? ¿Qué hace Genaro ahí? ¿Qué le está ocultando?
Este es solo el comienzo. Y ya desde ese primer giro me enganché completamente a la historia.Cada capítulo te deja con ganas de más, y eso hace que sea imposible soltar el libro. Aparte de Acerina, que es el punto de partida, está es una novela coral por lo que hay otros personajes, que me parecieron interesantes y muy humanos. Todos tienen luces y sombras, y eso hace que la historia se sienta muy real y conectes con ella.
El libro toca muchos temas delicados: la mentira, la identidad, el deseo, los prejuicios, el dolor… pero lo hace desde un lugar respetuoso y emocional, es delicado y crudo. Toda una mezcla que hace que sientas la historia, que entiendas a cada uno de los personajes. Np pude evitar ponerme en su piel.
No quiero contar mucho más para no hacer spoilers, pero sí quiero decir que terminé el libro con el corazón apretado, pensando en todas las vidas que se cruzan en silencio, en todo lo que callamos por miedo, y en lo importante que es vivir con verdad, aunque duela, aunque a veces parece que hay caminos por lo que tenemos que transitar para poder abrir los ojos.
En resumen, Playa del Inglés me sorprendió muchísimo. Es una historia intensa, emotiva, llena de personajes que se sienten vivos, con sus luces y sombras. Me hizo reflexionar, me sacó sonrisas, me rompió un poquito por dentro…
Si estás buscando un libro que te atrape desde la primera página, que hable sin filtros de temas reales, con personajes diversos, imperfectos y llenos de vida, este libro es para ti.
No suelo puntuar los libros pero en este caso le doy 5 estrellas porque me ha devuelto algo que creía perdido: esas ganas locas de leer sin parar. Y bueno, tengo que terminar esta reseña con ese pensamiento que siempre me viene cuando termino un libro de Ismael y es que ya estoy deseando que publique el siguiente, porque leer a Ismael siempre es un acierto.