Evandro Affonso Ferreira
Traducción: Rita da Costa
Maresía libros
Páginas: 123
ISBN: 9788494450112
En esta bella y devastadora novela, Evandro Affonso Ferreira - autor de culto en Brasil, un clásico en vida - aborda la soledad, la locura, la decrepitud o la muerte como evidencias inexcusables de la existencia. El mendigo que sabía de memoria los adagios de Erasmo de Rotterdam es la historia de un hombre refinado y culto, profundo conocedor de la obra del humanista holandés, que, después de ser abandonado por su amada sin más ceremonia que una escueta nota, pierde la razón y vagabundea por las calles de São Paulo a la búsqueda de destellos poéticos que mitiguen su radical desamparo, Metáfora de la desarraigada condición humana, el mendigo desafiará el olvido y la desesperanza escribiendo a lápiz el nombre de ella - una N - en los espacios aún vacíos de la urbe, mientras trae a la memoria los momentos plenos de intimidad afectiva e intelectual compartidos con su amor, antes de que el tiempo, la tormenta, el viento los borren para siempre.
Antes que nada quiero avisar que es muy posible que esta reseña sea muy diferente a lo que hago normalmente y es que nunca había leído un libro como este, en realidad hace días que lo terminé pero hasta ahora no me había atrevido a traerlo pues creo que es difícil encontrar las palabras exactas para definir lo que me ha parecido este libro, quizás solo su autor tenga esas palabras y es que si algo ha demostrado en este libro es el gran dominio de la palabra, consigue moldearlas para transmitir tanto en "tan poco"
Tengo que reconocer que el principio con este libro no fue bueno y es que carece de diálogos, lo que personalmente me suele hacer densa la lectura, pero una vez que conseguí conectar con la historia no me importó en absoluto, pues más que una ausencia lo vi como una virtud, pues de esta forma podemos llegar a conocer a este personaje, un mendigo que ha llegado a esa situación cuando se da cuenta que sin su amada no le queda nada, un hombre que vive en su propia locura y el autor logra transmitir ese sentimiento sobre todo de reflexión, que hace que lejos de ser monótona por su falta de diálogos se convierta en ágil.
Es un libro corto del que no puedo contar mucho más y aunque pudiera hacerlo, hay que leerlo para entenderlo, pero si es cierto que me ha parecido original, pero sobre todo que tiene calidad literaria.
Aunque es cierto que tiene muchos puntos favorables lo cierto es que no terminó de encantarme, ya que aunque me parecía bueno algo me dejaba con un sabor amargo, más bien agridulce y no pude disfrutar como me hubiese gustado de este libro aunque si reconozco su calidad.
¡Gracias a la editorial por el ejemplar!
Hola! No conocía el libro y aunque no pinta mal tengo tantos pendientes que por ahora lo dejaré pasar.
ResponderEliminarUn saludo!
Yo intentaré leerlo, aunque me echa hacia atrás el sabor agridulce que dices que te ha dejado el libro. Quizás para mí es diferente ^^ ¡muchas gracias por la reseña!
ResponderEliminarHola Flashia:
ResponderEliminarNo conocía el libro. No creo que lo lea. Aunque me llama la atención que sea original y que esté bien escrito.
Un beso ^^